En las temporadas suele haber conjuntos que no tienen la atención del gran público. A veces eso es una gran noticia: estar lejos del descenso y navegar con calma por la mitad de la tabla puede ser un éxito para cuadros que no pueden batallar por levantar trofeos. Desde luego lo es para un Southampton que sigue alejándose de la quema jornada tras jornada e incluso fantasea ya con luchar por un puesto europeo. En la costa sur habita un técnico que ha dejado entrever a la nueva dirección que no quiere ir mucho más allá de su contrato en 2024: Ralph Hasenhüttl. Qué lástima. Es probable que nos perdamos, si al final todo es cierto, a uno de los entrenadores más interesantes que nos podía dejar el fútbol europeo en la próxima década.
“No quiero estar como Roy Hodgson: entrenando con 74 años”. El austriaco, tras hablar sobre su futuro en los banquillos en la revista Kicker, tiró balones fuera sobre sus comentarios para los medios alemanes. No parece estar preparado para firmar más contratos. La realidad es que no podría haber una peor noticia para el proyecto de los saints, que últimamente no hace nada más que mejorar.
La entidad, acostumbrada durante muchos años a sacar talento a raudales de su cantera, ha tenido que cambiar sus ideas en los últimos cursos. Hay camadas en las que no te pueden salir cuatro o cinco jugadores que con 18 años ya pueden estar en el primer equipo. Por ello, era imperativo comenzar a invertir en futuras estrellas que pudieran sumar desde su llegada y que, por supuesto, tuvieran grandes opciones de revalorización en un futuro no muy lejano. Ya ocurre con Tino Livramento: el ex del Chelsea es uno de los mejores laterales de la Premier League con tan solo 18 años.
El famoso 4-2-2-2 de Hasenhüttl, que tiene muchos adeptos en el fútbol europeo, sigue dando sus frutos. En ese contexto disfrutan dos centrocampistas que ya llevan tiempo reclamando atención de clubes de enjundia: Oriol Romeu y James Ward-Prowse. Lo de su capitán, de hecho, empieza a ser un absoluto escándalo ya que cada golpeo que realiza tiene peligro. Hace un año pudimos hablar con Matthew Le Tissier y nos aseguró que para él “era un placer” que pudieran ser comparados. Si el Dios del Southampton lo dice hay poco más que decir. Ese buen trabajo de la sala de máquinas también se ve reflejado en las áreas: la llegada de Armando Broja, apuntad su nombre, y el asentamiento definitivo de Salisu y Bednarek dejan al Soton en una posición envidiable para un gran número de conjuntos en Inglaterra. Todo eso dirigido por un técnico que parece que no quiere seguir mucho más en el fútbol. La vida.
Imagen de cabecera: @SouthamptonFC