Los cancerberos de Petkovic

Suiza
es, tras Die Mannschaft, la selección que más futbolistas de la Bundesliga
aporta a esta edición de la Copa del Mundo, con un total de 10. Entre ellos,
los porteros de Borussia Dortmund, Borussia Mönchengladbach y RB Leipzig. La de
Vladimir Petkovic no entra en ninguna quiniela y, ni siquiera, es favorita para
pasar a octavos en un grupo que comparte con Brasil, Costa Rica y Serbia. El
combinado centroeuropeo ha perdido, con el tiempo, el crédito con el que
contaba por la calidad de algunos de sus jugadores y el nivel que mostraban con
sus clubes.

Para
este torneo, Petkovic ha decidido contar con dos porteros de garantías y uno
que no solo se ha pegado un año en blanco, sino que aún no ha debutado con el
combinado nacional absoluto. Sommer (Borussia Mönchengladbach), Bürki (Borussia
Dortmund) y Mvogo, los elegidos, no es que hayan tenido un papel importante
este año, pero están ahí. Mvogo, incluso, dejó fuera a otro guardameta de la
liga alemana, el veterano Marwin Hitz que, a pesar del 12º puesto del FC
Augsburg durante la 2017-18, los penaltis parados y el haber sido el portero de
la liga que más paradas hizo, no le valieron para pasar de la lista previa.

Como
curiosidad, el único partido que disputó Yvon Mvogo en la temporada
recientemente finalizada fue en Augsburgo, ante Hitz, y el equipo local se
llevó la victoria. Sí, solo jugó uno, porque en Leipzig, la portería es para el
húngaro Peter Gulacsi, sin discusión. Hitz ya sabe lo que es jugar con la
absoluta, aunque a sus 30 años, tan solo ha participado en dos partidos. ¿Era
merecida su convocatoria final? Por actuación durante la 2017-18, sin duda,
pero finalmente Petkovic eligió la apuesta de futuro y el estreno de Mvogo en
una fase final, ya que Hitz formó parte de la selección suiza que disputó la
Eurocopa 2016, con Petkovic al frente, en la que compartió convocatoria con los
otros dos, Sommer y Bürki.

Está claro que Yvon Mvogo aún no está para coger la
responsabilidad de ser el titular. Que viaja para ir adquiriendo experiencia al
lado de otros porteros que sí la tienen, tanto en partidos continentales a
nivel de clubes, como a nivel de selección. Porque Mvogo acaba de salir
prácticamente del cascarón y tanto Sommer como Bürki ya tienen su camino
recorrido. Aunque en este último año a ninguno de los tres le ha ido como
esperaba, se tienen que conjurar para hacer de Suiza una selección competitiva,
y no ese país que llega con un par de individualidades destacables y luego se
la acaba pegando. Ellos son los porteros suizos y ‘su casa’ está en la
Bundesliga. Misma rampa de salida y mismo objetivo. Aquí no valen las
injusticias, los méritos o experiencia. Los tres deben remar en la misma
dirección. Colaborar para que, por fin, Suiza haga algo grande o, al menos,
cumpla el objetivo que se propone.