El holandés Max Verstappen celebró hoy su segunda victoria en la Fórmula 1 al imponerse en el Gran Premio de Malasia por delante del británico Lewis Hamilton, quien pese a no poder defender la «pole» consiguió afirmarse como líder del campeonato.
Verstappen, que cumplió el sábado 20 años, se llevó la victoria con su Red Bull tras aprovechar algunos problemas en el Mercedes de Hamilton, que cedió el puesto de vanguardia en la cuarta vuelta.
El alemán Sebastian Vettel logró una gran remontada con su Ferrari y finalizó cuarto tras salir desde el último lugar, aunque no pudo evitar que Hamilton ampliara de 28 a 34 puntos su ventaja en el campeonato.
Verstappen, que había comenzado tercero, no tuvo problemas en defender el primer puesto asaltado en el inicio de la carrera y celebró su segundo triunfo en la categoría tras el obtenido el año pasado en Barcelona.
«Sentí muy bien el coche desde el comienzo y vi que Lewis tenía algunos problemas con la tracción», dijo Verstappen, que llegó a la meta con una ventaja de más de 12 segundos sobre el británico. «Él tenía más que perder que yo en lo que respecta al campeonato, así que pude hacer mi carrera. Es increíble haber ganado».
Considerado una de las mayores promesas de la Fórmula 1, Verstappen estaba viviendo hasta hoy una temporada para el olvido. El de Sepang es apenas su segundo podio en un año en el que sufrió siete abandonos. «Después de la temporada que había tenido, esta victoria llega en el momento justo», señaló el joven holandés.
El finlandés Kimi Raikkonen, que había logrado el segundo lugar en la clasificación, no pudo comenzar la carrera por un nuevo problema de motor de Ferrari. La escudería italiana, sin embargo, pudo contener daños en un fin de semana para el olvido gracias al cuarto puesto de Vettel.
El alemán había comenzado la carrera en el fondo por culpa de un problema de motor durante la clasificación, pero pudo escalar hasta quedar a un suspiro del podio, cuyo último escalón quedó en manos del australiano Daniel Ricciardo, tercero con su Red Bull.
«Hemos tenido un coche muy rápido hoy. De haber comenzado adelante hubiéramos ganado», dijo Vettel tras superar a un rival tras otro a lo largo de la carrera. «Ha sido una carrera de contención de daños. Pudimos recuperar mucho puestos, pero no pudimos llegar más alto».
Ferrari aprovechó que Vettel largaba en el último lugar para introducir piezas nuevas en el motor del coche, incluyendo un quinto turbo. El cambio implicó un castigo de 20 puestos en la largada para el alemán, pero al comenzar en el fondo no tuvo efecto práctico alguno.
Quinto en Malasia, que hoy vivió su despedida de la Fórmula 1, fue el finlandés Valtteri Bottas, con el otro Mercedes, mientras que el mexicano Sergio Pérez logró el sexto puesto a bordo de Force India. El belga Stoffel Vandoorne consiguió un espectacular séptimo lugar con McLaren y su compañero, el español Fernando Alonso, se quedó a un paso de la zona de puntuación al finalizar undécimo.
Los Williams del canadiense Lance Stroll y el brasileño Felipe Massa y el Force India del francés Esteban Ocon completaron, en ese orden, las diez primeras posiciones.
«Ha sido una carrera dura. Red Bull ha estado por encima de nosotros hoy», reconoció Hamilton, que dijo haber tenido problemas con su batería. «Aún tenemos trabajo que hacer con el coche. No hemos tenido el ritmo adecuado este fin de semana. Debemos seguir trabajando».
A falta de cinco carreras para el final del campeonato, Hamilton suma 281 puntos por los 247 de Vettel y los 222 de Bottas y se acerca a su cuarto título mundial. La carrera de hoy fue la última en Malasia, que dejará la Fórmula 1 tras formar parte del calendario en los últimos 19 años.
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