El lateral José Enrique Sánchez ha anunciado su retirada del fútbol profesional con solo 31 años. Lo ha hecho a través de una entrevista en el diario Marca, en la que ha desvelado su calvario con las lesiones en los últimos años.
“Una lesión de rodilla que se supone que era para tres meses acabó convirtiéndose en dos años. Me vieron cinco doctores en Inglaterra, pero no dieron con el problema. Aun no estoy bien del todo, ni física, ni mentalmente, pero me siento con ganas de empezar de cero”.
José Enrique, valenciano de nacimiento, comenzó a destacar muy joven en la cantera Levante y en las categorías inferiores de la selección española y el Valencia le fichó con 18 años. Allí no disputó un minuto y destacó en los dos años posteriores en el Celta de Vigo y el Villarreal antes de dar el salto a la Premier League con el Newcastle en 2007, cuando tenía 21 años. En 2011 le fichó el Liverpool y desde 2014 apenas pudo jugar por la lesión.
“No podía jugar sin medicación, ni siquiera entrenarme. Era duro, desesperante, a veces me mareaba en los entrenamientos de tanta medicación. Tras cada partido o esfuerzo la rodilla se hinchaba como un balón y estaba dos días sin casi poder andar”.
José Enrique cuenta que estuvo tres meses jugando con un menisco roto y se tuvo que escapar a España porque no podía ni caminar. Terminó jugando con el equipo Sub-21 del Liverpool. “¿Qué hago aquí con chavales de 20 años?”. En su partido de despedida de Liverpool, Klopp le dejó ser capitán: “Un honor que le agradeceré siempre”.
José Enrique, en su última etapa en el Real Zaragoza
La temporada pasada firmó dos años con el Real Zaragoza, y aunque jugó 30 partidos, las cosas no iban bien en la rodilla. Este verano, le dijo a la directiva que todo había acabado.
“Con 45 o 50 años quiero poder andar. Quiero ser un hombre mayor que pueda caminar, no quiero ser un inválido”.
Marca confirma que José Enrique seguirá ligado al fútbol trabajando como agente de futbolistas junto a su hermano Salva.
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