El suspendido presidente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, y su hijo Gorka abonaron las fianzas de 300.000 euros y 150.000 euros que el juez les había impuesto respectivamente para poder salir de prisión.
Según aseguraron a dpa fuentes judiciales, Villar y su hijo podrán abandonar la cárcel de Soto del Real, cercana a Madrid, en las próximas horas.
Ambos fueron detenidos el 18 de julio en el marco de la “Operación Soule”, que investiga la gestión corrupta del organismo, junto al también suspendido vicepresidente Juan Padrón. Este último tiene decretada la misma fianza que Villar para poder abandonar la cárcel, pero aún no ha efectuado el correspondiente pago, según confirman las mismas fuentes de la Audiencia Nacional.
A los tres se les aplicaron las mismas medidas, además de la suma económica, para hacer efectiva su libertad bajo fianza: retirada del pasaporte, comparecencias semanales en el juzgado y permanecer en todo momento localizable a través del teléfono móvil.
Villar, su hijo y Padrón están acusados delitos como corrupción entre particulares, apropiación indebida, administración desleal, falsedad documental y alzamiento de bienes en un proceso judicial que sigue abierto.
Al revelarse las intenciones del presidente de permanecer en el cargo a pesar de la investigación y de su propia detención, el gubernamental Consejo Superior de Deportes (CSD) lo suspendió provisionalmente durante un año, así como a Padrón.
Por el contrario, Villar sí que renunció la semana pasada a sus cargos de vicepresidente de FIFA y UEFA, la federación internacional y la confederación europea, respectivamente.
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