La gran oportunidad de Kieran Trippier

Hace casi 27 años (19/09/1990) em Bury, a orillas del río Irwell, nacía Kieran Trippier, actual lateral del Tottenham y ex, entre otros, del Burnley. Tras la venta ya oficializada de Kyle Walker, el futbolista dirigido por Mauricio Pochettino, tiene ante sí la gran oportunidad de su carrera deportiva, eclipsada por el defensor más caro de la historia desde que llegó en el verano de 2016 al conjunto de los Spurs.

Trippier se formó en la academia de uno de los equipos de su zona, el Manchester City, donde no llegó a debutar profesionalmente. El Barnsley fue el primer club en apostar por su contratación, en forma de cesión en el año 2010.  Tras dos cesiones en el mismo club, y una más en el Burnley, se unió al equipo de Turf Moor definitivamente en la 11/12. Allí conoció al Mourinho pelirrojo, un Sean Dyche que llegaría en noviembre de 2012 al banquillo. Con Dyche, Trippier ascendería a la Premier League y progresaría como lateral hasta convertirse en uno de los juguetes más apetitosos para los grandes de la liga con el descenso del equipo. Trippier y Danny Ings fueron piezas clave en el ascenso de 2014, y en la gran campaña firmada en 2015, lo cual le valdría para firmar con el Tottenham.

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Aunque con los Spurs no pudo hacerse un hueco en el once inicial, y es que el nivel de fútbol practicado por el nuevo lateral del Manchester City era muy alto, cada vez que Trippier saltaba al campo lo hacía bien, demostraba que el recambio era un buen futbolista que dejaba siempre el listón alto. Esta temporada llegó la gran oportunidad para Kieran, Pochettino conocía el interés del City en Walker, y el interés del propio Kyle de jugar a las órdenes de Pep Guardiola, lo que le permitió a Trippier mantener cierta regularidad a partir del mes de marzo en liga, además de ser titular en la F.A. Cup a lo largo de la campaña. Todo esto le permitió debutar con la selección inglesa en junio, coronando un gran final de año.

Pero ¿Quién es Kieran Trippier? ¿Cómo juega este chico?

Son las preguntas habituales que uno se hace sobre un jugador que realmente no ha tenido muchos minutos en los últimos dos campeonatos de liga inglesa. Trippier es un lateral de vocación ofensiva, le gusta sumarse al ataque pegado a la línea de banda para poner buenos centros al área, de los que los atacantes, en particular un gran cabeceador como Harry Kane, se pueden beneficiar cada fin de semana. En los 22 encuentros disputados este año, regaló siete asistencias. En su carrera acumula 53 asistencias y nueve goles en sus 270 partidos como profesional. Datos que hablan bien del trabajo ofensivo, importantísimo en un esquema con carrileros como es el del Tottenham, que, tanto con tres centrales como con dos, usa laterales largos que se sumen al ataque.

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Jugador veloz y muy físico, Kieran Trippier no es cojo defendiendo, y es que la elegancia al cruce define a un jugador curtido en la segunda inglesa con 174 partidos de experiencia en Championship y 56 en Premier League. Solo 22 amarillas en su carrera deportiva, pocas veces pierde la posición, ya que ganarle la espalda es muy complicado por su velocidad y buena colocación, es raro verle cometer errores o faltas a destiempo. Un futbolista con las ideas muy claras, en parte gracias al bueno de Sean Dyche, que le amaestró en el trabajo defensivo para hacer de él un lateral completísimo.

Ahora el Tottenham tiene 50 millones para buscar un lateral derecho, y seguramente llegue alguien que apunte a titular, pero antes de correr por la banda de Wembley (estadio local del Tottenham en la próxima temporada mientras construyen el nuevo White Hart Lane) tendrá que ganarle a un chico que lleva dos años esperando su momento, un Kieran Trippier que tiene ante sí la oportunidad de su vida.