El fabricante de artículos deportivos Puma fracasó hoy en su intento de vetar vía judicial la comercialización de un modelo de calzado deportivo por parte de su máxima competidora, la empresa Adidas.
El Tribunal de Brunswick, en el norte de Alemania, desestimó la petición de Puma, que perseguía prohibir que Adidas vendiese las zapatillas deportivas «Stan Smith Boost«.
La compañía demandante acudió a la justicia porque entendía que la firma de la competencia le había copiado el diseño de la suela de dicho calzado, que Puma había previamente registrado.
No obstante, el fallo del juez determinó que entre los modelos que comercializaban ambas empresas existían notables diferencias y, por lo tanto, concluyó que Adidas podía continuar vendiendo el calzado deportivo.
Las firmas Adidas y Puma, ambas alemanas, son las dos mayores productoras de artículos deportivos de Europa. Desde hace décadas, las dos empresas de Herzogenaurach, en el sur del país, mantienen una fuerte rivalidad.
En 1924, los hermanos Adolf (Adi) y Rudolf Dassler fundaron juntos una fábrica de calzado, pero más tarde se separaron y cada uno formó su propia firma: Adolf fundó Adidas y Rudolf Puma.
Si bien los tiempos de competencia más apasionada ya quedaron atrás, en Herzogenaurach todavía se siente esa rivalidad: todos bajan la mirada para detectar qué marca de calzado usa la persona que está enfrente. Se considera un signo de pertenencia: a Adidas, la segunda marca mundial de artículos deportivos, o a Puma, la número tres pero a una gran distancia.