El Brighton and Hove Albion jugará por primera vez en su historia la Premier League. La victoria ante el Wigan y el posterior empate del Huddersfield en casa del Derby County han propiciado el ascenso de los ‘seagulls‘. Ha pasado mucho tiempo desde su última aventura por la primera división del fútbol inglés, exactamente 34 años desde que el club descendiera de la extinta First Division. En aquel año de descenso, el club perdió también la final de la FA Cup ante el Manchester United por 6-2 en el global, por aquel entonces se jugaba a doble partido la final.
Se pueden decir muchísimas cosas de este ascenso, pero sobresale la persistencia y el merecimiento de un proyecto que arrancó en 2014 con Chris Hughton en el banquillo tras el lamentable paso de Sami Hyypia. Antes, el camino fue edificado por Gustavo Poyet y su ascenso a Championship en 2011 y su coqueteo en los playoff de ascenso a la Premier League en los años posteriores.
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— Sky Bet Championship (@SkyBetChamp) 17 de abril de 2017
El último día del año de 2014 se consumó la contratación de Chris Hughton para enderezar el rumbo del Brighton and Hove Albion, Sami Hyypia solo pudo ganar 6 partidos en los 26 que dirigió a los ‘seagulls‘, tampoco con Hughton el equipo logró enderezar el rumbo, unas malas decisiones en el mercado de fichajes, y varias cesiones sin nivel, dejaron al equipo coqueteando con el descenso a League One durante un tramo importante de la temporada, suerte que Blackpool, Milwall y Wigan eran peores equipos y descendieron con merecimiento.
En el mercado invernal del curso pasado llegaría una de esas incorporaciones que cambia el rumbo de los clubes, a cambio de más de 3M€ Anthony Knockaert se incorporaba al Brighton and Hove Albion tras unos meses en el Standard Lieja, anteriormente el francés había militado tres temporadas en el Leicester City donde consiguió el ascenso a Premier League, y donde se llevó una de las grandes decepciones de su carrera.
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La pasada temporada, el Brighton era un líder sólido con la mejor defensa del campeonato y con un ataque rápido y contundente que le hacían ser el candidato número uno al ascenso, pero como bien es sabido, la Championship es una de las competiciones más duras y exigentes del planeta fútbol, partidos cada tres días unidos a dos copas nacionales que hacen que los equipos superen el medio centenar de partidos. La racha de los ‘seagulls‘ fue tan buena que el equipo no perdió ningún encuentro hasta el 19 de diciembre, un mal partido en el Amex ante el Boro hizo que el Brighton perdiera algo más que el liderato, perdió la fe. Un solo punto en cinco encuentros hizo que Hughton rotara piezas y diera alternativa a nuevos jugadores, entre ellos Knockaert. El francés se asentó en el flanco derecho y el Brighton encadenó 13 puntos en los cinco partidos posteriores al mes fatídico. El calendario no sonrió a los sureños que debían cerrar su Championship dependiendo de ellos mismos pero con la tarea de vencer a Derby o Middlesbrough para cerrar su ascenso directo a Premier League. El primer match ball fue en casa, el Amex Stadium lució como nunca antes para llevar al Brighton a lo más alto pero un duro partido ante el Derby se decidió en los minutos finales, Weimann ponía el 0-1 a 15′ del final y James Wilson rescató en el último instante del encuentro un punto insuficiente, había que ganar en Riverside.
Una final anticipada por un puesto en Premier League se dilucidaba en casa del Boro, el empate servía a los locales para ascender y las cosas pronto se pusieron de cara para los de Karanka cuando Stuani hizo el primero en la primera mitad del encuentro. Los ‘seagulls‘ no se rindieron y llevaron el peso del encuentro, pero era muy difícil hacer ocasiones a una de las mejores defensas del Championship. El gol de la esperanza llegó a balón parado tras una asistencia precisa de Knockaert a la cabeza de Stephens, la misma cabeza que minutos después propició el fin de la esperanza tras una absurda y salvaje entrada sobre Gastón Ramírez al cual lesionó de gravedad y se llevó una merecida tarjeta roja. El ascenso del Boro se consumó y el Brighton volvía a verse las caras con la realidad del playoff de ascenso.
Los de Hughton se verían las caras con el Sheffield Wednesday en el recordado Hillsborough, el equipo acusó el cansancio mental de los últimos partidos y el verse fuera de nuevo de Premier League hizo que los ‘Owls‘ ganaran en casa por 2-0, resultado que no pudieron dar la vuelta en el Amex con el 1-1 final que dejó al Brighton una temporada más en Championship.
Chris Hughton lo volvería a intentar, este verano se movió rápido para conseguir otro goleador que rotara los bajos momentos de Baldock y Hemed y se trajo a Glenn Murray que venía de jugar nada en el Palace y Bournemouth. Le buscó un gran compañero a Lewis Dunk en Shane Duffy para hacer hormigón delante de Stockdale y buscar así el ansiado ascenso que por fin llega en el día de hoy. Con Norwood, y la incorporación a título definitivo de Sidwell dotó de opciones desde el banco y descanso a los fijos del mediocampo del Brighton.
La invasión al Amex, el Brighton es de Premier League | Getty
Esta temporada el comienzo fue más irregular, grandes victorias y patinazos en el primer tramo de la temporada que desembocó en la más fiel de las regularidades a partir de la jornada 14 cuando el Brighton alcanzó el segundo lugar que da acceso al ascenso y no abandonó nunca más ninguna de las dos primeras posiciones del Championship. Con una victoria en sus últimos tres encuentros certificará el primer puesto y campeonato.
Al fin, Chris Hughton tiene su ascenso merecido con los ‘seagulls‘ al que sumar los ascensos con Newcastle y Norwich City. Fiado en su básico 4-4-2 en el que los interiores tienen un largo recorrido para ayudar que el equipo no se parta en dos mitades. Sus delanteros no se caracterizan por su rapidez, pero al jugar con un doble delantero los balones en largo son siempre un peligro en cualquier prolongación. El equipo del Amex utiliza mucho el ataque lateral para la creación de la jugada, lo que hace que los rivales tengan que bascular para tapar las entradas lo que genera huecos para el remate o la segunda jugada. Un juego práctico basado en evitar los contragolpes rivales por el posicionamiento de la línea defensiva, y un ataque en el que Knockaert tiene la libertad y la obligación de generar superioridades en su zona para desnivelar los emparejamientos y obligar a los rivales a activar un sistema de ayudas que siempre genera desorden en las defensas rivales.
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— Tomer Hemed (@tomerhemed10) 17 de abril de 2017
Los nombres clave de este Brighton and Hove Albion son:
- David Stockdale (31): Portero corpulento al que el Fulham no dio oportunidades hasta el año del descenso, ahí se mostró dubitativo, tres años después es todo un seguro por alto con una gran intuición y reflejos, uno de los mejores de la categoría.
- Bruno Saltor (36): Capitán, líder y comodín en la zaga ‘seagull’. El español llegó desde Valencia a la aventura inglesa de la mano de Poyet y se ha quedado como una de las grandes leyendas de su historia. 5 temporadas y casi 200 partidos en su haber.
- Lewis Dunk (25): Personalmente el mejor central de la categoría, alto, fuerte y rápido para sus 192 centímetros. Con técnica para hacer jugar el balón y con un gran desplazamiento en largo, durará poco en Brighton si sigue con su progresión.
Bruno, Dunk y Knockaert | Getty
- Shane Duffy (25): La otra ‘torre’ del eje de la zaga, más ímpetu y con mejor marca que su compañero, son el complemento perfecto de la mejor defensa del Championship. Fue la inversión más importante del equipo tras pagar 5M€ al Blackburn por sus servicios.
- Gaetan Bong (28): Entre el camerunés y Pocognoli han sido los encargados del carril zurdo de los ‘seagulls’. Llegó de un Wigan descendido libre y se ha adaptado a un equipo que defiende bajo y sus carencias se ocultan.
- Dale Stephens (27): El nexo de unión entre una rocosa defensa y un centro del campo con mucho recorrido, Stephens es el mediocentro posicional que se encarga de crear la jugada desde abajo. Se incorpora siempre con peligro al balón parado y es el encargado de guardar la posición de los laterales que se incorporan al ataque.
- Steve Sidwell (34): Ha sido utilizado por Hughton como complemento a Stephens por delante de Norwood y Kayal. Su veteranía y experiencia han sido vitales en partidos ajustados. Con menos llegada que en sus años de apogeo físico, ha sabido dar al equipo siempre lo que ha necesitado.
- Jamie Murphy (27): En el flanco izquierdo han brillado dos nombres, el de Jiri Skalak durante la primera vuelta y a partir de ahí el de Jamie Murphy, mucho más regular en el rendimiento que su compañero checo y que ha sabido dar la vuelta a la situación inicial y aportar al equipo ya sea con minutos finales o saliendo desde el inicio.
- Anthony Knockaert (25): La estrella del Brighton, la estrella del Championship. Talento, dominio, control, velocidad, regate y gol. Lo tiene todo, una suerte para esta liga, y un talento que el planeta fútbol conocerá con las luces de la Premier League. La vida le da otra oportunidad en Premier League para resarcirse de su irregularidad en el Leicester, Knockaert está preparado.
- Glenn Murray (33): Veterano de mil batallas que prefirió dar un paso atrás para comandar un ataque que tener pocos minutos en Premier League. Rendimiento por encima de expectativas para este delantero de área que lleva 22 goles en Championship.
- Sam Baldock (28) y Tomer Hemed (29): Injusto sería dejar a uno de los dos fuera de este XI tipo de Hughton. Ambos han demostrado la importancia de tener un recambio de garantías para los delanteros titulares, ambos han marcado 11 goles cada uno en Championship y ambos han luchado para llevar al Brighton a la Premier League.
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