“Excelente”… Así definió L’Equipe el rendimiento de Clement Grenier en el 3-0 con el que la Roma venció a domicilio al Palermo.
El francés fue el gran protagonista del partido, el primero que disputaba como titular. El mediocampista de 26 años, en los 64 minutos que jugó, distribuyó 53 balones con una precisión del 73%, con 4/6 en pases largos y 4/7 en uno contra uno. A esto se añaden tres ocasiones creadas y cuatro pases clave, además de la asistencia en el primer gol de El Shaarawy.
Nada mal, teniendo en cuenta que era considerado poco más que un elemento misterioso hasta hace poco. Llegado en el mercado de enero con el objetivo de reforzar el puesto de volante del mediocampo de la Roma, al exjugador del Lyon le costó mostrarse ante alguien como Spalletti, que le usó por primera vez como titular contra los rosanero.
El rendimiento de Grenier sirvió para reencender la polémica en torno a la falta de adecuación de la plantilla romanista: ¿un banquillo demasiado corto para competir en largos períodos o incapacidad del técnico giallorosso para aprovechar plenamente todos los recursos disponibles?
Cuestión delicada esta última, que ya sacudió también a Maurizio Sarri en el Napoli, con el presidente Aurelio De Laurentiis que varias veces ha expresado su decepción ante las continuas suplencias y el escaso uso que el técnico napolitano ha realizado de Pavoletti o Rog, entre otros. Situación similar en la Roma, donde encontramos, además de a Grenier, jugador infrautilizados como Paredes -titular solo nueve veces-, El Shaarawy -46 minutos de media por partido-, Mario Rui o Vermaelen -estos dos últimos más allá de las lesiones-.
Precisamente Grenier parece ser uno de los motivos del desencuentro entre Spalletti y el club. El entrenador toscano había pedido en enero a Kessié y Defrel, y sin embargo recibió a este centrocampista low cost de quien se decía mucho bueno hace tres temporada y que desde entonces había desaparecido del radar del fútbol de élite.
Sin embargo, si bien puede ser algo puntual, el mediocampista francés mostró en la hora que jugó en Palermo que puede jugar todavía a buen nivel: toque de balón, visión de juego, habilidad a balón parado que impresionaron a los periodistas, hasta el punto de lanzar una comparación con Er Principe Giuseppe Giannini, ídolo indiscutible de la Sud entre los ’80 y ’90.
La Roma celebra el gol de El Shaarawy a pase de Grenier en Palermo | ALESSANDRO FUCARINI/AFP/Getty Images
También hay que decir que, teniendo en cuento además que la comparación es muy prematura, Grenier, si quiere confirmar lo bueno que mostró contra el Palermo, añadiría características técnicas que hace un tiempo que no se ven desde hace un tiempo en el mediocampo de la Roma.
En especial la propensión a la verticalidad, virtud que tanto a Paredes como a De Rossi les cuesta presentar. El mediocampista argentino ha mostrado una gran precisión de pases (86%) pero la mayor parte son jugadas horizontales en corta, con baja dificultad y de escasa utilidad como regista. El capitán, por su lado, no tiene su fuerte en el pase en largo, algo que sí parece tener Grenier. Strootman tiene otro tipo de características.
De este modo, el francés podría convertirse en una pieza útil para la causa giallorossa, siempre y cuando mantenga el nivel visto contra el Palermo. En ese caso, los 3,5 millones de euros previstos en caso de ejecutar la opción de compra no serían tantos.