El técnico francés Arsene Wenger fue protagonista el pasado fin de semana debido a un altercado con el cuarto árbitro durante la victoria de su equipo por 2-1 sobre Burnley en la Premier League. El máximo organismo del fútbol inglés, la FA, se ha pronunciado.
El incidente comenzó cuando señalaron un penalti a favor del Burnley en el tiempo de descuento, lo cual enalteció al entrenador del Arsenal empujando varias ocasiones a Anthony Taylor, colegiado auxiliar del encuentro, lo que provocó la expulsión de Arsene Wenger.
«Debí haberme callado, y pido perdón por no haberlo hecho. No fue con mala intención. Tuve que mantener el control, a pesar de lo que estaba ocurriendo«, dijo Wenger tras el encuentro.
Con el empate en el marcador y Wenger fuera del banquillo, el árbitro principal señaló minutos más tarde penalti a favor del conjunto gunner, el cual Alexis Sánchez transformó a lo panenka.
La Asociación del Fútbol (FA) comunicó el lunes que Wenger «usó vocabulario agresivo y/o insultante hacia el cuarto árbitro. Se acusó además que tras su expulsión del área técnica, su conducta continuó en los túneles del Emirates y tuvo contacto físico con el cuarto colegiado, lo que equivale a una conducta inapropiada«.
En 2012, Alan Pardew, entonces entrenador del Newcastle, fue multado con 28 mil euros y recibió una suspensión de dos partidos por empujar a un árbitro asistente durante un partido ante el Tottenham.