Cuando Coutinho cayó lesionado hace unas semanas frente al Sunderland, muchos se llevaron las manos a la cabeza. Pensaban que desaparecía su creador y finalizador, el que marca las diferencias. Es verdad, que la lesión del carioca ha sido perjudicial para el equipo –los reds se han alejado del liderato- pero este Liverpool no es solo un jugador. Está Milner –como lateral zurdo-, un Henderson que está imperial como constructor y los tres espectaculares atacantes. Pero a Coutinho le han llegado a hacer una marca individual. ¿Echa de menos el Liverpool al sudamericano?
Los de Klopp están asentados en un 4-3-3 en el que prima la presión para acabar, cuanto antes, en la meta rival. Por ello es muy importante ser intenso y, con balón, es necesario tener jugadores con la clase para calmar el ritmo infernal de la Premier. Ahí aparece el ex del Espanyol. Un chico que actualmente podría jugar en cualquier entidad de este mundo. Es goleador, asiste y sobre todo es un extremo moderno. El técnico alemán ha instaurado su forma de jugar y eso se nota en sus chicos, que corren sin parar. Coutinho, por su parte, le ha entendido a la perfección. En su ausencia cabe decir que Lallana ha cogido el timón y se le nota muy diferente a lo que era hace un par de cursos.
Klopp | Getty
Asimismo, para este derbi al que le estamos haciendo un seguimiento especial, Origi parece el más indicado para ocupar su lugar. Las posiciones de los reds son cambiantes ya que Firmino, Mané y Origi nunca están clavados en una demarcación. Esto, se puede extrapolar al centro del campo donde el único que está muy fijo es Jordan Henderson. Por ello, la conclusión es que el Liverpool simplemente echa de menos a Coutinho por lo que llegó a ser en las primeras jornadas de competición –uno de los mejores del mundo- pero los reds continúan jugando fantásticamente bien por su trabajo de equipo. A los de Anfield no se les puede resumir en una individualidad.