Eran las 6:59 de la mañana del pasado día 5 de septiembre cuando el 112 informaba de un grave accidente de coche en el kilómetro 27 de la A6, en Madrid. Junto al anuncio del suceso, también se informaba del traslado de un varón de 24 años, copiloto de uno de los coches involucrados, al Hospital 12 de Octubre. Se trataba de Bruno Hortelano.
El ya convertido en mejor velocista español de la historia, aparte de presentar varias contusiones sobre todo en la cabeza, ingresó con graves heridas en la mano derecha, por la que se llegó a temer y mucho por su estado. Aunque finalmente, nada que se escapara gracias a Dios, del cuidado de unos doctores que pasaron desde ese momento a participar del reto, el reto que tiene por delante Bruno Hortelano de volver más fuerte que nunca.
Restablecida la mano, turno para la rehabilitación, todo cerca de una familia y un equipo técnico encargado, cómo no, de actuar como principales soportes de un Bruno sonriente y confiado durante el anuncio de su vuelta a la competición el pasado 27 de octubre. Una meta que todo hace indicar que llegará en el Mundial de Londres 2017, cuando el joven nacido en Australia, pero de nacionalidad española, espera estar listo entrenando poco a poco desde ya.
Ahora, pese a pensar en prepararse para 100, 200 y 400 metros, nuestro atleta ya de 25 años quiere centrarse especialmente en la prueba de 200 metros. Una disciplina con la que consiguió proclamarse campeón de Europa en Amsterdam en julio y con la que también consiguió brillar en los pasados Juegos Olímpicos de Río al superar a velocistas de la talla de Yohan Blake y Justin Gatlin y dejar el récord de España en 20,12 segundos.
Lista de éxitos que confía en poder seguir agrandando un Bruno Hortelano ambicioso, con la mente puesta en batir el récord de Europa de 200 en poder del italiano Pietro Mennea (19,72). Reto para el que espera traer a España a su entrenador, el estadounidense Adrian Durant, siempre con el objetivo de mejorar y de seguir siendo uno de los referentes del atletismo no sólo en nuestro país, sino en todo el mundo.