Juanan MOTA – Enorme prueba de madurez, una más, de este equipo, un buen Valencia intenso y con ganas de agradar a su afición realizó un gran encuentro buscando las sensaciones para afrontar su encuentro más importante del año el próximo jueves. El Atleti, duro como el hierro en defensa aguantó el gran inicio de los locales y mató el partido en una jugada entre Gabi y Raúl García que el navarro remató a gol en su especialidad, la cabeza. Su 17º gol de la temporada.
Tarde primaveral en Valencia, dónde millares de desplazados rojiblancos tomaron la capital del Turia para acompañar a este equipo en una nueva final por el campeonato liguero.
En el Vicente Calderón acudimos más de un centenar de personas a un evento organizado por @futbolmahou en la sala VIP del coliseo rojiblanco, allí disfrutamos de un magnífico evento en una tarde entre amigos colchoneros disfrutando y sufriendo con el Atlético de Diego Simeone.
Un Simeone que no se reservó nada para la Champions, sí lo hizo Juan Antonio Pizzi, alineó un equipo muy competitivo con 5 cambios con respecto al partido del jueves pasado en Europa League. Si alguien tenia dudas del compromiso ché en la Liga Española, al minuto de empezar el encuentro se le borró. Alcácer buscó el gol con un disparo desde la frontal que se fue por poco desviado.
El Atlético comenzó el partido dejando la iniciativa al Valencia, un equipo que dominó la primera media hora del partido aunque creó poco peligro en la meta de Courtois. El Atlético poco a poco consiguió desperezarse y sumaba llegadas peligrosas por la banda izquierda con Koke y Filipe Luis creando juego en esa zona del campo. David Villa en un remate precioso no encontró la portería de Guaita por escasos centímetros.
A pocos minutos de acabar la primera mitad un centro frontal de Gabi al punto de penalti fue rematado por Raúl García batiendo a Guaita en una mala salida del meta de Torrent.
El gol, por el momento y por el escenario fue magnífico para Simeone que pudo plantear una segunda parte más acorde al estilo de este Atleti, defensa y contragolpe buscando a Diego Costa. El hispano-brasileño gozó de las dos mejores ocasiones de la segunda mitad, en ambos mano a mano, el ganador fue Vicente Guaita que se resarcía así del fallo en el tanto rojiblanco.
Pizzi movió el banquillo dando entrada a Vargas, Feghouli y Cartabia, cambios ofensivos buscando la victoria en la tarde de hoy. El propio Feghouli tuvo la ocasión más clara de los locales, un disparo suyo tras recorte en el área se marchó cerca del palo con un Courtois ya batido.
Al final del encuentro Juanfran fue expulsado por hacer una entrada por detrás a Cartabia, el internacional se perderá el partido de contra el Levante la próxima jornada.
El pitido final fue una alegría para los 5.000 desplazados a Mestalla y los que estábamos en el Vicente Calderón, a la fiesta en el Vicente Calderón se unieron desde el principio de la tarde dos leyendas rojiblancas. Quique Ramos (1979 – 1988) ganador de una Copa del Rey y una Supercopa de España e Internacional con España e Iselín Santos Ovejero (1969-1974) ganador de 2 Ligas y una Copa del Rey que también fue entrenador del conjunto rojiblanco a principio de la década de los 90.
Agradecer a la organización del evento el trato recibido durante toda la tarde, siempre con una sonrisa para hacernos sentir en casa.
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