124 días ha durado la experiencia de Roberto Di Matteo en el Aston Villa. Una sola victoria en 11 partidos dejan al equipo villano en una decepcionante 19ª posición, cuando el objetivo único del equipo era retornar lo antes posible al lugar que le corresponde en la Premier League.
El Aston Villa, campeón de Europa en 1982, sumaba dos décadas de manera consecutiva en la máxima categoría del fútbol inglés cuando la pasada temporada descendió al Championship tras un año desastroso. El directiva asignó la tarea de devolver al equipo a la élite al técnico italiano Roberto Di Matteo, campeón de la Champions League con el Chelsea en el año 2012.
Desde ese éxito, la carrera de Di Matteo en los banquillos ha sido más bien discreta. Fue despedido en el Chelsea unos meses después de ganar la Copa de Europa, nada más comenzar la temporada siguiente. Luego, durante la temporada 2014/15 entrenó sin pena ni gloria al Schalke 04 -sextos en Bundesliga y eliminados en octavos de final de Champions-. Este nuevo reto para devolver a un histórico a la élite parecía un punto de inflexión en su carrera.
Y lo ha sido, pero para mal. Apenas cuatro meses en el cargo y ya está de nuevo en la calle. El Aston Villa ya ha anunciado que su sustituto en el banquillo será Steve Clarke. ¿Quién confiará de aquí en adelante en Di Matteo?