Gane o pierda el Barça, Piqué siempre da la cara y lucha hasta el final. Ejerce de defensa, ayuda en ataque cuando se le requiere, hace de portavoz, da la cara por el club e, incluso, a veces, actúa de presidente. Como bien apuntó Rafa Cabeleira (@RafaCabeleira) en su cuenta personal de Twitter, gastar 5 millones en recuperarlo es, sin lugar a dudas, una de las mejores decisiones tomadas por el club. Estos son 3 motivos por los que el barcelonismo quiere a Piqué:
Regularidad futbolística. La primera es evidente: Piqué es el líder incuestionable de la zaga, el que manda y pone orden. No se le halaga tanto como a la ‘MSN’, a Busquets o a Iniesta, pero es pieza fundamental de la columna vertebral del Barça. Impecable atrás y recurso como falso 9, él es un seguro de vida para Luis Enrique. Su ausencia es un dolor de muelas para el equipo.
Da la cara. Piqué es de la casa, siente los colores y no tolera que nadie se meta con el club. Lo defiende a diestro y siniestro, tanto en el campo como ante la prensa o en las redes sociales. Es tan listo que incluso prefiere, a veces, crear polémica para desviar la atención y quitar presión a compañeros/directivos.
No se ciñe a aspectos deportivos. Piqué no solo defiende al club ante cualquier ataque, sino que además vela por garantizarle un buen futuro. Por ello, si le surge la oportunidad también ayuda institucionalmente, con el acuerdo con Rakuten como mejor ejemplo de ello. Gracias a él se fraguó el inició de las conversaciones entre la compañía japonesa y el Barça. Al fin y al cabo, Piqué es un tipo curioso, que siempre quiere saber más, aprender más, y que, por ende, cuenta con una larga lista de contactos con los que el club podría acordar jugosos contratos. De hecho, es habitual, tal y como explicó en Papel, verle organizar cenas con gente que sabe más que él para simplemente escuchar sus reflexiones, tomar nota y aprender.